La Justicia ordenó un análisis complementario forense al cuerpo.
La autopsia solicitada por el juez de Instrucción 2 de Oberá, Horacio Alarcón, al cuerpo de la jubilada Ramona Cardozo (61) no arrojó la causa del deceso, según las fuentes.
Se informó que por el avanzado estado de descomposición del cadáver los médicos aún no pudieron establecer el motivo de la muerte y tampoco determinar si fue abusada. Se estimó un tiempo de fallecimiento de 24 horas previas a su hallazgo. Por el momento los restos de la víctima no serán entregados a sus familiares, ya que se ordenaron estudios complejos o complementarios que estarán a cargo del Cuerpo Médico Forense del Superior Tribunal de Justicia.
Además, se tomarán pruebas genéticas, teniendo en cuenta que más allá del anillo que llevaba en su mano izquierda y que posibilitó que su hijo la reconozca, no existe otra evidencia concreta para la Justicia respecto a la identidad de la mujer. De esta manera serán clave los estudios bioquímicos e histopatológicos, además de los entomológicos, vinculados a la fauna cadavérica, tal como se hizo en su momento para resolver la causa del deceso del menor Josías Galeano (15).
Situación de los detenidos
Acerca de la situación de los dos sospechosos capturados en averiguación de la muerte de la jubilada se supo que continuarán tras las rejas hasta que se conozcan los resultados de los análisis complementarios. Se trata de dos jóvenes en situación de calle, de 19 y 23 años, quienes fueron vistos por testigos y junto a la víctima el pasado viernes a la madrugada. Horas más tarde el hijo de la mujer radicó una denuncia dando cuenta de su desaparición. Pasaron tres días, hasta que el lunes a las 15 fue hallado el cuerpo. Estaba desnuda en un baldío ubicado a una cuadra de la terminal de ómnibus de Oberá. Los investigadores tratan de rearmar las últimas horas de Ramona Cardozo, desde que fue vista junto a los dos sospechosos y una mujer, madre de una de ellos.
El cadáver estaba entre malezas y a metros de un precario campamento donde se cree se reunían y residían varios hombres en situación de calle. Entre todos los testigos que entrevistó la policía, dos complicaron a uno de los implicados, quien sería el supuesto “propietario del campamento” o “líder”. Además, unos vendedores de sandías aseguran que les dijo el domingo pasado y como al pasar “parece que hay un cuerpo en el monte”, sin embargo, no lo tomaron en serio.
Por eso y otros indicios este hombre aparece como principal sospechoso. Las declaraciones de los testigos aún deben judicializarse. El primer detenido, de 23 años, fue capturado el mismo día del hallazgo en el barrio de Villa Bonita. El segundo implicado fue ubicado el martes.
Fuente: Primera Edición