La lucha contra el cambio climático está en marcha. ¿Son las ciudades una solución? Según la ONU, en 2050 el 70% de la población vivirá en zonas urbanas. ¿Cómo pueden las ciudades acoger de forma sostenible más habitantes?
“La vida urbana tiene que salvar el planeta”, afirma Xuemei Bai, profesor australiano de investigación sobre sostenibilidad. Pero ¿es la vida urbana realmente más sostenible que en zonas rurales o en los suburbios?
El economista del clima Gernot Wagner considera que, en las urbanizaciones de casas unifamiliares o adosadas, las emisiones de CO2 son entre el doble y el triple que en el centro de la ciudad o en el campo. Pero, ¿por qué las ciudades son cruciales para el clima? Sencillamente porque tienen un mayor impacto. Según la ONU, en 2050 más de dos tercios de la población mundial vivirá en ciudades.
Medidas como la renovación de viviendas o una línea de autobuses eléctricos son útiles para más gente que en el campo. Entonces, ¿deberíamos vivir todos en megaciudades para salvar el planeta? En Europa muchos ya no quieren vivir en ciudades y prefieren las afueras o el campo. Entonces, ¿cómo tendrán que ser las ciudades del futuro para acoger al mayor número posible de personas de forma sostenible y seguir siendo habitables? Porque los rascacielos no son necesariamente la mejor opción. La urbanista Dita Leyh lo compara con un campo de espárragos: “Son como puntas de espárragos que se levantan por todas partes. Pero los espacios que se crean entre ellas no son realmente útiles. No es un espacio público interesante”. Entonces, ¿cómo debería ser una ciudad?
No hay un modelo único, porque cada ciudad tiene retos distintos y condiciones climáticas y sociales diferentes. ¿Pueden realmente salvarnos las ciudades?