La generala Laura Richardson, enviada de Joe Biden, llegó a Buenos Aires para promover proyectos bilaterales que refuercen la seguridad regional. Acompañada por el embajador estadounidense Marc Stanley, oficializó la entrega de un Hércules C-130 para la Fuerza Aérea.
La jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, Laura Richardson, se reunió hoy con funcionarios nacionales en el marco de su segunda visita a la Argentina en menos de un año. Parte de su acotada agenda capitalina incluyó una reunión con el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, en Casa Rosada; y con el ministro de Defensa, Luis Petri, ocasión en la que oficializó la transferencia de un nuevo avión Hércules C- 130H a la Fuerza Aérea Argentina.
En el edificio ubicado en la calle Azopardo al 250, la generala protagonizó el primer encuentro de una serie de entrevistas con funcionarios del gobierno que encabeza Javier Milei. Pasadas las 14, se trasladó a Balcarce 50 para entrevistarse con el “ministro de ministros” de Javier Milei, con el fin de ratificar la alianza bilateral en materia de cooperación en defensa y seguridad, dos áreas sensibles para Estados Unidos en línea con el avance de potencias emergentes en la región, entre ellas China.
A las 14.18, el embajador estadounidense, Marc Stanley, esperaba a la generala del ejército estadounidense en el Salón de los Bustos para escoltarla hasta el salón Eva Perón. Cuando los relojes daban las 14.29, la generala llegó al Palacio de Gobierno minutos después de Petri.
Richardson, encargada de promover los intereses estadounidenses en la región, cerrará su agenda con un viaje a Ushuaia, el enclave geopolítico en el Cono Sur. Allí visitará al personal militar local para conocer sus misiones y el papel que desempeñan en la salvaguardia de rutas marítimas que resultan vitales para el comercio global. Previo a su llegada, tenía pensado visitar Neuquén para inaugurar un Centro de Operación y Coordinación ante Emergencias pero finalmente no se concretó.
La donación del Hércules C-130
“Nos visitó la general Laura Richardson del Comando Sur de EE. UU. en Buenos Aires. Su visita incluye un momento histórico: la transferencia de un Hércules C-130H a nuestra Fuerza Aérea, símbolo de la sólida cooperación bilateral”, comunicó el ministerio de Defensa en su cuenta de Twitter.
La aeronave está valuada en aproximadamente 30 millones de dólares y es parte de una donación de asistencia de seguridad financiada por Estados Unidos.
“Este avión icónico, con trayectoria de servicio en 70 países, fortalecerá nuestras capacidades. Agradecemos a Estados Unidos por su apoyo continuo, seguimos trabajando juntos en áreas clave como la ciberdefensa y la preparación para desastres, construyendo un futuro seguro”, agregaron desde la cartera a cargo de Petri.
Desde la cartera liderada por Petri informaron que la visita de Richardson incluyó lo que calificaron de “momento histórico” que se concretó con la transferencia de un nuevo avión de transporte, un Hércules C-130H a la Fuerza Aérea Argentina, que fue leído como “símbolo de la sólida cooperación bilateral”.
“Este avión icónico, con trayectoria de servicio en 70 países, fortalecerá nuestras capacidades”, precisaron desde el Ministerio de Defensa, y agregaron: “Agradecemos a Estados Unidos por su apoyo continuo, seguimos trabajando juntos en áreas clave como la ciberdefensa y la preparación para desastres, construyendo un futuro seguro”.
Fuentes del entorno del ministro negaron que Richardson haya planteado su preocupación por el accionar chino en territorio argentino en esta primera reunión, tema que abordará con el jefe de Gabinete.
Se trata de una cuestión central, incluso para la administración libertaria, que ante la agencia Noticias Argentinas anticipó sus deseos de avanzar en una inspección técnica de los contratos de la Estación de Espacio Lejano.
“Hay algo raro con los contratos de la base. Se les dio un territorio donde prácticamente la Argentina no puede entrar”, precisó una altísima fuente a esta agencia sobre las actividades de la base, ubicada al norte de Bajada del Agrio, antes del puente del río Salado, sobre la ruta provincial 33, en la denominada Pampa de Pilmatué.
Además de la reunión con el funcionario que responde al presidente Javier Milei, Rirchardson tiene previsto disertar en un panel de debate sobre la integración de las mujeres en misiones de paz, defensa y seguridad, con especial eje en la importancia de la inclusión y la diversidad en los esfuerzos de seguridad global.
El viaje de la jefa del Comando Sur de los Estados Unidos a la Argentina
La jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, la generala Laura Richardson, llegó a la Argentina con una intensa agenda de reuniones con funcionarios del Gobierno nacional a fin de fortalecer los lazos bilaterales e impulsar proyectos tendientes a reforzar la seguridad regional.
La visita se produce en el contexto de la consolidación del vínculo diplomático entre las autoridades locales y la Casa Blanca, con énfasis en mejorar la asociación estratégica entre ambos países.
Fuentes de la Embajada de los Estados Unidos explicaron que el propósito central de la visita consiste en darle un mayor impulso a la colaboración militar de larga data entre ambas naciones, a fin de reforzar la seguridad regional y promover intereses compartidos.
“Los vínculos entre nuestras fuerzas armadas son tan firmes y arraigados como los vínculos entre nuestros ciudadanos”, expresó Richardson luego de aterrizar en el Aeroparque metropolitano.
“Estamos comprometidos a trabajar estrechamente con Argentina para que nuestros esfuerzos colaborativos de seguridad beneficien a nuestros ciudadanos, nuestros países y nuestro hemisferio de manera duradera y positiva. Estoy feliz de volver a Argentina y aprender más sobre este hermoso país”, puntualizó la jefa militar.
Quién es Laura Richardson: formación, trayectoria y condecoraciones
Richardson es oriunda de la ciudad de Northglenn (Colorado). Cursó sus estudios en la Universidad Estatal Metropolitana de Denver. Fue comisionada como una oficial en el Ejército de los Estados Unidos y se formó como aviadora del Ejército. También completó una maestría en Estrategia de Recursos Nacionales de la Escuela para la Seguridad Nacional y Estrategia de Recursos Dwight D. Eisenhower de Universidad de Defensa Nacional.
La generala Richardson previamente sirvió como Comandante del Ejército Norte de los EE.UU. (el Quinto Ejercito) en el Fuerte Sam Houston (Texas), el cual es el Componente de servicio del Ejército para el Comando Norte de los EE.UU.
Su notable trayectoria como jefa militar clave de los Estados Unidos incluye los siguientes nombramientos: Comandante Adjunto del Comando de las Fuerzas del Ejército de los Estados Unidos en el Fuerte Bragg, en Carolina del Norte; Jefa del Enlace Legislativo del Ejército ante el Congreso de los Estados Unidos en Washington; Jefa de Estado Mayor Adjunto de Comunicaciones del Cuartel General de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad en apoyo a la Operación Libertad Duradera (OEF) en Kabul, Afganistán; Comandante Adjunto de la 1.ª División de Caballería en el Fuerte Hood, Texas; y como Jefa del Comando de Pruebas
Operacionales del Ejercito de los EE.UU. en el Fuerte Hood, Texas.
A lo largo de su carrera, Laura Richardson comandó en combate a un Batallón de Asalto con la 101.ª División Aerotransportada (Asalto Aéreo), siendo desplegada con su unidad desde el Fuerte Campbell (Kentucky), a Irak durante los años 2003-2004, en apoyo a la Operación Libertad Iraquí (OIF).
A su vez, desempeñó numerosos cargos en otras órbitas, habiéndose desenvuelto como Asistente Militar al Vicepresidente de los EE.UU. en la Casa Blanca en Washington; sirvió como enlace legislativo del Ejército ante el Congreso en el Capitolio de los EE.UU., y como Planificadora de Campañas del Ejército en el Pentágono.
Las medallas y condecoraciones de la jefa militar incluyen la Medalla por Servicio Distinguido de Defensa, Medalla por Servicio Distinguido del Ejército (otorgada en dos ocasiones), la Medalla de Servicio Superior de Defensa (otorgada en dos ocasiones), la Legión al Mérito (otorgada en cuatro ocasiones), la Estrella de Bronce, la Medalla por Servicio Meritorio (otorgada en cinco ocasiones), y la Medalla Aérea (con Numeral 7).
También tiene varios premios de unidad, de servicio y de campañas, y numerosas insignias, entre ellas la Insignia de Combate, Insignia de Paracaidista, Insignia de Asalto Aéreo, Insignia de Aviador Senior del Ejercito, Insignia de Servicio Vice-Presidencial y la Insignia del Estado Mayor del Ejército.