El subgénero musical que ya es un fenómeno cultural pasa a estar vetado en festivales, conciertos y hasta en países.
Luego de que Peso Pluma, el cantante mexicano de corridos más famoso a nivel global, fuese presentado dentro de la grilla de artistas en el Festival de Viña del Mar en Chile, se reabrió el debate acerca de los narcocorridos y su impacto en el contexto actual.
Mientras muchos lo ven como parte de la cultura, otros lo perciben como una apología al delito y a las bandas criminales.
¿Qué son los narcocorridos?
Los narcocorridos son canciones que nacen a partir de un género musical mexicano: los corridos. Sus raíces se remiten al romance español, donde se combina el polca, el vals y la mazurca. La única diferencia de esta variación es que en este caso específico se tratan de odas a narcotraficantes.
En muchas ocasiones se habla de drogas, venganza, secuestros, muertes y todas las atrocidades que estos grupos criminales son capaces de hacer. Incluso, han hecho referencia a famosos pandilleros y líderes como Joaquín “El Chapo” Guzmán. A lo largo de los años, esto también generó más rivalidad entre bandos, haciéndolo un factor más en la disputa por territorios, armas o reputación.
Los corridos tumbados de Peso Pluma en sus inicios
Emilio Kabande, más conocido como Peso Pluma, tiene un extenso historial, pese a su corta carrera musical, dentro de este subgénero. Los corridos tumbados del cantante se han visto más que nada en sus inicios, con menciones al Cártel de Sinaloa y al Cártel del Golfo.
Junto a Natanael Cano y Luis R. Conriquez, el cantante y compositor mexicano escribió muchos narcocorridos y hasta confesó haber realizado muchos por encargo.
“Esto va para ti, Peso Pluma. Abstente de presentarte el día 14 de octubre porque será tu última presentación por irrespetuoso y lengua suelta”. Esa fue una de las amenazas del Cártel Nueva Generación Jalisco. La banda criminal desplegó reiterados afiches en Tijuana afirmando que si el cantante se presentaba en la ciudad, lo matarían. Dicho y hecho, Kabande dio por suspendidas sus presentaciones y no se dijo nada más al respecto.
Prohibición: dónde no está permitido y cuáles son sus consecuencias
Por esto y muchas implicancias ilegales y violentas, los narcocorridos fueron prohibidos en distintos lugares. Muchas de las normativas gubernamentales se impusieron a finales del 2023, justamente acompañando el ascenso a la fama de Peso Pluma.
En Baja California, México, la regla veta los corridos tumbados de conciertos, bares y centros nocturnos. Lo mismo aplica en Sinaloa, Chihuahua y Quintana Roo.
La multa por interpretar o reproducir ese tipo de música puede ser de 10 a 180 jornadas de trabajo comunitario. En otros estados, se cobra entre 105 mil y 138 mil pesos mexicanos. Tijuana, que aprobó la ley de prohibición hace tan solo unos meses, exige 70 mil dólares para quienes elijan dar conciertos de ese tipo.
¿Cuál fue la polémica con Peso Pluma en Chile?
Si bien en Chile este subgénero musical no está prohibido por ley, desde el Gobierno consideran seriamente tomar medidas al respecto. La llegada de Peso Pluma como artista principal del Festival de Viña del Mar no cayó nada bien y trajo el debate de nuevo a la mesa. La presentación sería el 1 de marzo de 2024, pero hay muchos movimientos que intentan detener que suceda.
La ministra de Interior y Seguridad de Chile, Carolina Tohá, afirmó: “El Gobierno no censura en lo más mínimo, pero ciertamente le preocupa y no le gusta que se promueva la cultura narco y hace todo lo posible porque ello no suceda”. Definitivamente es un tema que dará mucho que hablar y que desconcierta a gran parte de la sociedad.
Por Dolores Barón-DEF