El ídolo de Newell’s tuvo su partido homenaje en el Estadio Marcelo Bielsa y el encuentro, plagado de figuras, tuvo de todo
Una de las incertidumbres que había en la previa era qué iba a pasar con Ángel Di María. Reconocido hincha de Rosario Central, pero ídolo de la selección argentina, era un misterio saber si el ex PSG sería silbado o aplaudido en el partido homenaje por parte de los hinchas. Sorpresivamente, lo que ocurrió fue que el Fideo recibió una ovación del público Leproso.
“Creo que es algo lindo, se nota que se puede, es cuestión de ponerle voluntad, es eso. Hay que dejar de pensar un poco en una camiseta o en otra, el fútbol es para divertirse y disfrutar. Agradecido, mas que nada por Maxi, tenía miedo, me preguntó cuando entré que había pasado. Eso es lo mas lindo”, comentó el propio Di María, cuyas grandes actuaciones en la Albiceleste han dado sus frutos en la gente”.
Sobre ese episodio, Gabriel Heinze habló desde el costado del campo de juego: “Es un ejemplo para todos que estamos viviendo un momento de escasa educación y estos ídolos tiene un corazón que tenemos que seguirlos”. Algo similar dijo Ezequiel Lavezzi, también identificado con el Canalla: “Fue muy bueno que pase eso, muy bueno en serio, se lo merece”.
En apenas 10 segundos, Pablo Pérez fue amonestado
De arranque nomás, Héctor Baldassi decidió amonestar a Pablo Pérez. El mediocampista, reconocido por recibir muchas tarjetas amarillas a lo largo de su carrera, en esta ocasión no había hecho nada, ni siquiera había tocado la pelota. Pero, fue castigado por el juez en el inicio y tuvo que jugar condicionado.
A los 8 minutos, Scaloni se llevó los aplausos de todos cuando fue al piso para cortar una subida del brasileño Fabio Aurelio. “Eso era lo que solía hacer”, dijo bromeando cuando le tocó descansar sobre la barrida que hizo que la gente lo ovacione.
Cerca de los 35 minutos Maxi, que había marcado un gol, se dio el lujo de tirar un caño. Claro, la víctima fue Pachu, el cómico fanático de La Lepra que después de ser humillado de esa manera, pidió el cambio: “Lo vi venir, pero no pude hacer nada”, comentó sobre el caño.
En el segundo tiempo se vio un momento muy emotivo cuando Benjamín Agüero, hijo del Kun y nieto de Diego Maradona, apareció para obsequiarle a Maxi la camiseta que Diego usó en su paso por Newell’s. La Fiera no dudó y se puso la casaca para jugar lo que restaba del encuentro con esa histórica prensa.
“Le entregué algo que amo y cuido con mi alma y dárselo a Maxi es hermoso. La idea surgió con Claudia, mi abuela, y ella dijo ‘la llevamos’”, comentó Benjamín, quien se mostró muy feliz por ser parte del evento. Además, porque pudo saludar a Messi: “Es el mejor amigo de mi papá, pero yo lo veo como un fan más”.