El presidente de República Dominicana, Luis Abinader, asumió este viernes 16 de agosto un segundo y último mandato de cuatro años en presencia de más de una decena de jefes de Estado y de Gobierno, entre ellos el rey de España. En su nuevo discurso de posesión, el mandatario prometió crecimiento económico y un conjunto de reformas sociales, al tiempo que criticó las consecuencias de las recientes elecciones en Venezuela.
Luis Abinader asume su segundo y último periodo presidencial en República Dominicana, bajo las promesas de controlar la inmigración haitiana, mantener la economía a flote e impulsar reformas sociales.
“Juro ante Dios y ante el pueblo, por la Patria y por mi honor, cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes de la República, proteger y defender su independencia, respetar los derechos y las libertades de los ciudadanos y ciudadanas y cumplir fielmente los deberes de mi cargo”, aseguró Abinader antes de recibir la banda presidencial de manos del presidente del Senado, Ricardo de los Santos.
A continuación juró el cargo su vicepresidenta, la académica y administradora de empresas Raquel Peña, de 57 años, quien repite en el puesto para el período 2024-2028.
Tras ello, el mandatario, un economista de profesión de también 57 años, inició su discurso, dando las gracias a los presentes.
“Asumo con humildad, orgullo y compromiso la sagrada responsabilidad que por segunda ocasión me concede el pueblo dominicano”, remarcó el Abinader.
“Me siento profundamente honrado de tomar juramento, después de un proceso electoral ejemplar en el que los dominicanos y dominicanas manifestaron libremente su voluntad y demostraron una vez más la madurez democrática que hemos alcanzado como nación”, señaló en alusión de su amplia victoria y la de su Partido Revolucionario Moderno (PRM) en las elecciones del 19 de mayo pasado.
En su alocución, el líder político destacó “la estabilidad y la buena salud” de la democracia dominicana, así como “el dinamismo económico y las grandes oportunidades que aquí existen para las empresas y la inversión”.
Abinader promete crecimiento económico y reformas sociales
Abinader, un exempresario de 57 años, se aseguró otro mandato cuando obtuvo el 58% de los votos en mayo con una plataforma pro empresarial con una postura dura contra la corrupción y la prohibición de inmigrantes del vecino Haití, afectado por el conflicto.
“No hay una solución mágica para el éxito, pero tenemos una receta simple para lograrlo”, aseveró el presidente en una ceremonia transmitida en vivo, comprometiéndose a promover la inversión privada para hacer crecer la economía y fortalecer la transparencia y la eficiencia en el gasto público.
La República Dominicana, la mayor economía en el Caribe, aspira a duplicar su producto interno bruto de 113.000 millones de dólares para 2036.
Abinader afirmó que presentaría reformas a los legisladores que buscan mejorar los derechos laborales, la protección social, garantizar la independencia del organismo electoral y evitar que los futuros presidentes excedan el límite de dos mandatos definido en la constitución.
Por otra parte, el mandatario prometió aumentar la seguridad entrenando a 20.000 policías más en los próximos cuatro años. Su nación ha deportado a cientos de miles de inmigrantes del vecino Haití y ha reforzado la seguridad fronteriza mientras un conflicto entre pandillas continúa empujando a la gente a campamentos improvisados y hundiendo a millones en el hambre.
El jefe de Estado ha instado al despliegue completo de una misión de seguridad largamente esperada en Haití, pero indicó que su país no intervendrá. “Pedimos que Haití no sea olvidado nuevamente, pero no se puede pedir más a la República Dominicana”, sostuvo.
El socialdemócrata asume un nuevo gobierno para un periodo en el que se prevén una fuerte estabilidad en el ámbito político. Y es que el Partido Revolucionario Moderno de Abinader ganó una fuerte mayoría tanto en la Cámara Alta como en la Baja, lo que le permite al oficialismo aprobar leyes con facilidad.
“No creemos en personalidades autoritarias ni en líderes mesiánicos que quieran tener el destino de un país en sus manos”, agregó en referencia a la crisis política en Venezuela. El mandatario dominicano criticó la violencia y la falta tras las elecciones del pasado 28 de julio en el país suramericano.
República Dominicana es una de las naciones con las que Venezuela ha cortado relaciones debido a su oposición a la ratificación del presidente Nicolás Maduro como vencedor por parte de las autoridades venezolanas.
En la víspera de su investidura, Abinader anunció algunos nombramientos importantes para su gabinete, incluido el del economista Joel Santos como ministro de Minas y Energía.
José Ignacio Paliza, presidente del partido PRM y exsenador por la provincia norteña de Puerto Plata, fue nombrado ministro de la presidencia, encargado de coordinar entre el presidente y otros sectores.
El presidente dominicano también firmó un decreto para que miembros clave de la administración financiera permanezcan en sus puestos, entre ellos el veterano del banco central Héctor Valdez como gobernador de la entidad, Clarissa de la Rocha como vicegobernadora y Alejandro Fernández como superintendente del organismo de control bancario del país.
Por France24 con Reuters y EFE