La aeronave en la que viajaban se dirigía desde Buenos Aires hacia Posadas. Ante el llamado de auxilio, el galeno no dudó ni un segundo y salvó a un turista que sufrió un infarto en medio del viaje.
No pasa hasta que pasa. El último viernes, durante el partido de la Selección Argentina contra Países Bajos, los pasajeros de un vuelo de Aerolíneas vivieron una situación angustiante. Todo comenzó a raíz de las turbulencias que sacudían a la nave que partió desde Aeroparque, en Buenos Aires, con destino a Posadas.
La lluvia había cesado y eso representó una condición óptima para volar. Más que los nervios por conocer el resultado de las clasificatorias para las semifinales, nada preocupó a las personas. Transcurridos 15 minutos desde el despegue, un turista chileno de 65 años comenzó a descompensarse y la tripulación solicitó asistencia.
Carlos Wolheim, un médico misionero, viajaba en el mismo avión y, alertado por el pedido de auxilio, se desabrochó el cinturón y acudió al llamado. Vistiendo la camiseta del 10, a tono con el clima mundialista, el terapista socorrió al hombre. Según informaron, tenía antecedentes cardiovasculares y habría sufrido un episodio llamado síndrome coronario agudo.
“El hijo del paciente se levantó del asiento a pedir socorro y cuando el avión se estabilizó, me acerqué inmediatamente. No fue nada fácil. El hombre estaba lúcido pero tenía dolor en el pecho”, relató a El Doce.
La historia tuvo un final feliz. Gracias al especialista que acudió al instante y a que la aeronave contaba con los elementos necesarios, todo quedó bajo control. Con la ayuda de un desfibrilador y oxígeno en tubo, el pasajero fue estabilizado y no hubo necesidad de un aterrizaje de emergencia.
“Tuve incentivo de mis colegas para contar esta historia, porque al principio no quería decir mi nombre. Pienso que cualquiera en esa situación hubiera actuado de la misma manera”, sostuvo.
Al pisar suelo misionero, una ambulancia esperaba para trasladar al paciente a un centro médico. El galeno, por otra parte, descendió en medio de los aplausos de los demás viajantes, quienes celebraron su heróico accionar.
El profesional de la salud destacó el equipamiento con el que cuentan los aviones para atender este tipo de urgencias y también la actuación del personal. “Había una situación de pánico generalizada, pero la gente colaboró mucho”, aseguró.
Fuente: Canal12.com