El economista libertario la confirmó como su compañera de fórmula. Las ideas de antaño que sintetiza y caben perfectas en el discurso libertario. Su trayectoria, el trabajo como diputada y el uso de pasajes aéreos.
Si hay que señalar a una mujer en la vida de Javier Milei que esté cerca de ejercer una representación similar a la que ejerce su hermana Karina, esa mujer es abogada, nació en abril de 1975 y es su única compañera de bloque en la Cámara de Diputados de la Nación. Victoria Eugenia Villarruel es esa mujer que lo acompañó a sentarse por primera vez en una banca legislativa y quien el economista libertario quiere a su lado en caso de llegar a la Presidencia.
Lo que era una versión que circulaba abiertamente se terminó de confirmar en las últimas horas. El líder de La Libertad Avanza confirmó en televisión que Villarruel será su compañera de fórmula como candidata a vicepresidenta, de cara a las elecciones de este año.
Esta mujer es una de las caras más conocidas del espacio libertario. Abierta defensora de los genocidas condenados por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura militar, Villarruel también reúne en su discurso posicionamientos en contra de los derechos de las mujeres y las diversidades, expresiones contra de las comunidades de pueblos originarios y, por lo general, contra todo aquello que signifique un reclamo de tinte popular.
Cuando asumió como diputada dejó, de entrada, toda una declaración de principios. “Por las víctimas del terrorismo, si juro”, dijo, provocativa, esta abogada de 48 años.
De ahí en más, su accionar en la Cámara de Diputados ha estado atravesado por expresiones negacionistas, antimapuches y pro militares.
Su desempeño como diputada
De los 47 proyectos en los que estampó su firma de acuerdo a la base de datos de la Cámara de Diputados, algunos de los últimos son una resolución para expresar el beneplácito por el “abrazo del estrecho”, ocurrido el 15 de febrero de 1899 entre Julio Argentino Roca y su par chileno Federico Errazuriz; una declaración de persona no grata a los presidentes Nicolás Maduro (Venezuela), Miguel Díaz Canel (Cuba) y el expresidente de Bolivia, Evo Morales, con un “repudio a la reunión de movimientos cocaleros extranjeros en suelo argentino”.
También figura un proyecto de ley para instituir en 5 de octubre como “Día Nacional de las Víctimas del Terrorismo en Argentina” y una declaración de repudio a una convocatoria de la Dirección de Género de la Cámara de Diputados para conmemorar el aniversario de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo.
En un año y medio de gestión como diputada también se interesó en los supuestos faltantes de municiones desaparecidas en Córdoba, de aeronaves y falta de radares en Chaco, los gastos operativos de las Fuerzas Armadas. El listado se completa con pedidos de informes por un mural con la cara de Santiago Maldonado en la Ex Esma y la declaración de sitio sagrado mapuche del Volcán Lanín.
En sus pocas, pero elocuentes intervenciones en las sesiones de la Cámara, por lo general Villarruel protagonizó momentos de tensión con muchos de sus colegas que no ocultaron su rechazo a la postura negacionista y a pro militares. Uno de los últimos episodios fue en una reunión de comisión a la que asistió junto a Marcelo Cinto Corteaux, hijo de un represor que fuera jefe del destacamento 201 de inteligencia en Campo de Mayo durante la dictadura.
Hace un año, PERFIL publicó un artículo sobre el uso de pasajes aéreos por parte de Villarruel. La diputada había quedado señalada por haber usado 20 pasajes en dos meses a pesar de ser diputada nacional por la ciudad de Buenos Aires y no tener que volver a una provincia del interior como otros legisladores.
“Soy Diputada Nacional y de La Quiaca a Ushuaia voy a ir a todos los rincones del país donde haya argentinos sin ser escuchados. Mientras no sesionemos, me reuniré con todos los argentinos que pueda. Porque en donde no sean escuchados, acá tienen una diputada con la que cuentan”, fue la respuesta que dio vía Twitter.
Su trayectoria
Villarruel es titular del Partido Demócrata de la provincia de Buenos Aires, egresada de la Universidad de Buenos Aires y presidenta (NdR: ella se hace llamar presidente) de la Asociación Civil Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas. En su carta de presentación también señala que es técnica en Seguridad Urbana y Portuaria y autora de dos libros (uno en coautoría): ambos sobre los años 70′ y las guerrillas.
Para elegirla compañera de fórmula, Milei valoró que se trata de “una persona brillante, íntegra y honesta”. La definió como una amiga con la que se complementa muy bien “y eso es fundamental para lo que aqueja al país”.
La definición fue en una entrevista que ambos dieron en LN+ con Eduardo Feinmann y Jonatan Viale, donde Villarruel aprovechó para colar una de sus propuestas. La candidata a vicepresidenta pidió una reforma legislativa de las normas de seguridad interior y de defensa “para que los militares puedan operar dentro del territorio cuando no hay un estado de sitio”.
Además de lo que representa Villarruel en términos de una ideología que calza perfecto con lo que profesa Milei en términos económicos y sociales, esta abogada es clave para el reconocimiento y las relaciones internacionales de La Libertad Avanza. Es, por ejemplo, el nexo con el partido ultraderechista español Vox y fiel seguidora de los movimientos del brasileño Eduardo Bolsonaro.
Villarruel reúne, en definitiva, todos los condimentos necesarios para apalancar a Milei. Una representación de ideas de antaño atractivas para un electorado que las cree modernas.