La Quiniela, el principal juego del IPLyC SE, celebra este viernes, 51 años de permanencia, manteniendo su liderazgo entre los juegos que ofrece el instituto. En ese sentido, el presidente del IPLyC SE, Héctor Rojas Decut, saludó a todos los que trabajan en el desarrollo y la comercialización del juego recordando que “cumplimos 51 años de estar en el corazón y en la casa de los misioneros”.
“Estamos en un proceso de permanente innovación, con la incorporación de tecnología, estando a la altura de los tiempos que corren; 51 años después, el público nos sigue acompañando en todas nuestras propuestas”, comentó.
Acotó que “hoy tenemos un IPLyC concentrado en el juego responsable y la conexión con la sociedad a través de programas solidarios, que son la razón de la institución. Desde el día que asumimos creemos que el dinero que se recauda por juego debe volver a los misioneros y misioneras”.
Premios por los 51 años
El aniversario de la Quiniela Misionera se festeja con premios extras en todos los sorteos de la jornada. De esta manera, pagará 600 veces las tres cifras en los sorteos de La Previa, La Primera Matutina y La Vespertina. Y abonará 4.000 veces a las cuatro cifras en los sorteos de la Matutina, Nocturna y Nocturna Plus.
Las apuestas realizadas a través de la aplicación QuinApp tienen todos los jueves sorteos extras, pagando 700 veces a las tres cifras y 5.000 veces a las cuatro cifras en los sorteos de La Previa y La Vespertina.
Los inicios
El 11 de agosto de 1972, tras oficializarse la Quiniela Misionera con la apertura de cerca de diez agencias adjudicadas en Posadas, se realizó el primer sorteo utilizándose como parámetro la extracción de bolillas de la Lotería Nacional. Con el paso de los años, jugar a la quiniela sigue siendo una tradición en las familias misioneras. La inmediatez en la resolución del premio y la cantidad de sorteos que existen (La Previa, La Primera Matutina, La Matutina, La Vespertina, La Nocturna y La Nocturna Plus) gracias a la incorporación de nuevas tecnologías en la captura de apuestas, son otros puntos a favor de su expansión y favoritismo entre los clientes.
De los primeros tiempos quedan muchos y gratos recuerdos. La captura de apuestas significaba anotar los números en una libreta, por triplicado. Las agencias se dividían por zonas: Apóstoles, Oberá, Puerto Rico y Eldorado, y los agencieros eran quienes acercaban los tickets hasta Posadas en forma diaria para hacer la rendición. Con la apertura de más agencias, a partir de 1981, los empleados del IPLyC comenzaron a viajar diariamente para traer las jugadas del interior. Así, en cada localidad más importante había una, y era necesario llevar un cofre de seguridad en el que se cargaban los originales.
Con el paso de los años, el Instituto se comenzó a expandir. Se consiguió un local propio y desde la sede de calle Córdoba entre San Lorenzo y Colón –al lado de Casa Zachert- se pasó a Córdoba 1820 para el funcionamiento del área de juegos y de presidencia. La administración continuaba en Ayacucho y Córdoba. La nueva casa trajo aparejado el crecimiento, con local y unidades móviles propias porque anteriormente se movilizaban en un vehículo prestado por el IPS. Al asumir Toyosabro Guillermo Yamaguchi, mandó a comprar un Ford Falcón para la presidencia. Y luego los móviles para ir a buscar las jugadas.
Los empleados venían a trabajar también por la tarde porque los premios se pagaban por caja en ambos turnos y eso demandaba una tarea enorme.
A las bolillas había que separarlas en cajas, por centenas, después de cada sorteo. Había que lavarlas y pesarlas, y eran verificadas por los escribanos de turno antes de ingresarlas al bolillero.
Por etapas
El 24 de diciembre de 1975 se realizó el primer sorteo de la Tómbola Misionera con bolillero propio, lo que fue un acontecimiento dentro del historial del Instituto Provincial de Lotería y Casinos Sociedad del Estado (IPLyC SE), una de las herramientas más importante que tiene el gobierno provincial, que por Ley distribuye las utilidades a los distintos organismos y lo transforma en obras en beneficio de los más necesitados.
El IPLyC funcionó primero como una sala de juegos del casino capitalino, hasta que en febrero de 1972 se reglamentó la explotación de la quiniela a través del Decreto Nº 384/72, firmada por el entonces gobernador Ángel Vicente Rossi y el ministro de Bienestar Social y Educación, Miguel Soto e implementada por el gerente general Rodolfo Aguilar, quien se encontraba a cargo del organismo. Así se llegó al 11 de agosto de 1972, que, tras oficializarse el juego con la apertura de unas diez agencias adjudicadas en aquel momento, se realizó la primera jugada a través del sorteo de la Lotería Nacional.
El IPLyC fue creado por Decreto Nº 376 el 20 de noviembre de 1967, con el objetivo de explotar y administrar los juegos de azar en todo el ámbito provincial.
El primer acta
El 24 de diciembre de 1975 se hicieron girar por primera vez los bolilleros propios. El primer documento registrado en la sala de sorteos fue firmado por el escribano Miguel Ángel Alvarenga y el funcionario Roberto Picco. Ese día apareció a la cabeza el 973 (el hospital), y lo hizo en la segunda extracción del bolillero instalado entonces en La Rioja 151, de Canal 12. Fue así que quedaron en la historia los siguientes números: 2) 117, 3) 113; 4) 340; 5) 702; 6) 272; 7) 433; 8) 610; 9) 306 y 10) 862. A las 19.35 comenzaron a girar los bolilleros y doce minutos después se dio por finalizado el acto, con la presencia de niños cantores y auxiliares ayudantes.