La decisión fue tomada por el Tribunal Oral Federal 5, que llevo adelante el caso ESMA. La defensa reclamaba la libertad condicional
El represor ex marino Alfredo Astiz, una de las caras de la última dictadura y dos veces condenado a prisión perpetua por crímenes de lesa humanidad, seguirá preso. El Tribunal Oral Federal 5 decidió este martes rechazar el pedido de libertad solicitado por la defensa del represor que actuó en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA). El ex marino reclamaba el beneficio de la libertad condicional por haber cumplido dos tercios de la pena, indicaron a Infobae fuentes judiciales.
“Bajo las particulares circunstancias que la rodean, entendemos que no corresponde hacer lugar a la soltura peticionada”, coincidieron hoy los jueces Adriana Palliotti y Fernando Canero. Los jueces admitieron que “le asiste razón a la defensa en cuanto que, aún imaginando el peor escenario para su asistido, esto es, que se confirme la condena dictada en el marco de la causa nro. 1282 (ESMA Unificada), a futuro, ello obligaría a efectuar una unificación de condenas que le permitiría computar los plazos de detención que no se tuvieron en consideración al momento de practicarse el cómputo en los autos que llevan en el nro. 1270 (ESMA) —toda vez que no resultaban parte de la plataforma fáctica allí juzgada—”.
Pero subrayaron que “la propuesta defensista soslaya el hecho de que, para que resulte de aplicación lo normado en el art. 317 inc. 5º del CPPN, la totalidad del tiempo en detención debe ser bajo la modalidad de prisión preventiva”. Es decir, la norma no esa para aquellos que “como Astiz, si bien estuvo bajo esa condición, actualmente se encuentra cumpliendo la condena impuesta en el marco de la causa nro. 1270 (ESMA), extremo que impide computar el plazo que va desde el 25 de noviembre de 2015 a la fecha como tiempo de detención a la luz del art. 317 inc. 5º del CPPN”.
Por su parte, el juez Daniel Obligado añadió: “Más allá de coincidir con lo expresado por mis colegas preopinantes en cuanto a su postura y fundamentos, no debe soslayarse que nos encontramos frente a una persona que fue condenada por sentencia firme y confirmada por todas las instancias revisoras de la República Argentina en virtud de la comisión de crímenes que atentan contra la humanidad”.
“No debe perderse de vista que registra una grave condena (prisión perpetua) que sin perjuicio de no haber adquirido firmeza, la responsabilidad que allí le fue atribuida, obedece a delitos de suma gravedad e igual tenor a los señalados en el párrafo precedente. Por ello, en el presente caso, debe tenerse en especial consideración el perfil criminológico del sujeto en cuestión, y adoptar el fiel cumplimiento de las pautas más elementales del derecho internacional de los Derechos Humanos”, se añadió.
Astiz, de 72 años, está preso en la Unidad 31 de la cárcel de Ezeiza. Es una de las caras visibles de la dictadura. Su apodo era el “Angel de la Muerte”: se infiltró entre los familiares que buscaban saber qué había pasado con sus desaparecidos diciendo a que él también era una víctima que buscaba a su hermano. En diciembre de 1977, los represores de la ESMA secuestraron a los integrante que se reunian en la Iglesia de la Santa Cruz. Entre las víctimas estaba la lider de de las Madres de Plaza de Mayo Azucena Villaflor y las religiosas francesas Alice Domon y Leonie Duquet. Se cree que todos fueron asesinados en los famosos vuelos de la muerte. Por estas horas se están cumpliendo 45 años de aquella masacre.