TN Show estuvo cara a cara con el actor del momento. A punto de estrenar “Profesión peligro” (The fall guy), el canadiense volvió a desplegar su talento para la comedia y la acción en la que será una de las películas del año. Además, hizo una sorprendente referencia a nuestro país que nadie esperaba
“Vas vos”. Ese es el primer momento en el que la alegría, la adrenalina y los nervios se mezclan. Porque siempre es un acontecimiento encontrarte cara a cara con las estrellas de Hollywood. Más si son de tus favoritos.
Desde que supe que era yo la elegida para viajar a entrevistar a Ryan Gosling y a Emily Blunt por el estreno de la película The fall guy (Profesión peligro) hasta que se programó la entrevista, pasaron algunas semanas. Y desde que se confirmó la nota hasta que me tomé el avión solo pasaron 4 días. La adrenalina aumentó astronómicamente.
Además de hablar sobre su nueva película de acción, que ya se postula como una de las mejores del año, el actor también recordó su visita a la Argentina y reveló que durante su estadía en el país se volvió fanático del helado y de las medialunas. “Siempre pienso en eso”, comentó entre risas.
Cómo es una cobertura periodística desde adentro
Cuando finalmente pisás la tierra de la fábrica de sueños que es Los Ángeles, uno ve que la ciudad respira cine. Vive cine. Gira alrededor del cine. Una industria que es el motor de su economía y que hasta está tatuada en su geografía. Por eso todo tiene aún más sentido cuando encima te instalás dentro del barrio Universal City. Que a su vez está dentro de Studio City, que sería algo así como el municipio.
Son 48 horas. El hotel te pone más en clima. Carteles de King Kong y Shrek te dan la bienvenida. Un minion gigante asoma por encima de un estacionamiento. El hall está lleno de fotos de leyendas del cine. La habitación da a al parque de diversiones y a los estudios de cine. Hasta el baño tiene una foto del mítico cartel en la colina.
Ese primer día es el de la proyección de la película para los periodistas que van a hacer las entrevistas. El segundo, es el momento de la verdad.
Una van con luces de neón en su interior pasó a buscarme en el horario indicado para llevarme a los estudios Universal donde se hará el junket de prensa, a tan solo unas cuadras del hotel. Llego a los estudios Universal y yo estoy como una nena en un parque de diversiones. Me dejan en la puerta del estudio donde espera la prensa.
El negro hace que predominen dos gigantografías de la película. También está la camioneta que vemos en el film, el traje que usa el personaje de Ryan Gosling, catering, una maquilladora para dar un retoque final a los periodistas que vamos a hacer las notas. También podemos soñar por unos segundos a ser parte de una de las secuencias de acción del film y nos vamos a llevar ese videito de recuerdo. Los periodistas de todo el mundo esperan, algunos se deleitan con el catering, otros -como yo- no pueden pasar bocado porque la presión es mucha.
Hacer una nota así es casi casi es una definición por penales. Son 5 minutos con dos entrevistados. Esto se repite tanto con los actores principales como con los secundarios (en esta caso son los simpatiquísimos Hannah Waddingham, conocida por su Rebeca en Ted Lasso y Winston Duke, el actor de Pantera Negra). También tengo un encuentro con David Leitch, director con vasta experiencia en el cine de acción de la mano de exitazos como Deadpool 2, John Wick y Tren bala.
No se puede dudar mucho. No se puede extender la charla ni 10 segundos. No se puede saludar con un beso ni, por supuesto, tocar a los entrevistados. Las fotos también están prohibidas salvo que surja en la entrevista o lo sugieran ellos mismos, y siempre manteniendo la distancia que marca la puesta del set.
Por suerte, el equipo de The fall guy lo hizo todo más fácil. Todos dejan en claro que la intención de esta película, además de entretener al público, es volverse una carta de amor a la industria, especialmente para los dobles de acción y los equipos técnicos.
Leitch contó que la película no solo le encantó al gran Steven Spielberg sino que también lo convocó para preguntarle detalles del rodaje y le dijo que le encantaría que The fall guy se transforme en una saga cinematográfica. Duke aseguró que hace en gran parte sus escenas de acción, entre otras cosas, porque no es fácil que haya dobles con su contextura física. Y Hannah recordó que le quedaron algunas marcas del rodaje y que incluso le dejó en claro a su doble que ya no hay forma de que se libere de ella.
Ryan Gosling reveló qué es lo que más disfrutó de la Argentina
Lo primero que hizo Ryan Gosling al saber que había ido desde la Argentina fue preguntar si aún existe Freddo. Sí, la cadena de heladerías quedó marcada a fuego en el actor en una visita que ni él recuerda bien cuándo fue y que no estaba en los archivos argentos.
Los helados y las medialunas, que también destaca que no solo son riquísimas sino que se pueden comprar desde las cuatro de la mañana porque empiezan a prepararlas bien temprano. Es atento sin ser forzado. Es simpático sin pasarse de rosca.
Claro que el poco tiempo hace que uno se quede con ganas de charlar un rato más con ellos. Pero al menos, el regreso a la sala de prensa luego de las entrevistas y el posterior regreso a Buenos Aires se hace con la sensación de haber tenido un gran encuentro con ellos. Se podría decir que la defición por penales terminó con una victoria.
¿De qué trata “The fall guy”?
The fall guy es entretenimiento puro. Pochoclera 100%, de esas que no dejan casi peros. Puro disfrute. Explosiones, persecuciones, engaños, karaokes y hasta el récord de la escena en la que un vehículo logra la mayor cantidad de vuelcos en la historia del cine. También tiene romance, una gran química entre sus protagonistas y mucho, pero mucho humor.
Ryan Gosling ya había demostrado su capacidad de hacer reír en Two nice guys y, por supuesto, en Barbie. Y fue él mismo el que propuso que el humor sea protagonista casi más que la acción de esta película. Emily Blunt es la perfecta coequiper porque comparten el mismo tono ácido para la comedia. Y para los que quieran saber, Ryan Gosling está lejos de haberse mareado por ser, quizás, el actor del momento.
Su actuación en los Oscar fue el batacazo que nadie esperaba y para muchos es lo mejor que le pasó a los premios de la Academia en años o décadas. Y para él, a un mes de haber hecho historia, aún sigue siendo un “recuerdo borroso color rosa”. Sin embargo, cuando uno lo encuentra en un contexto en el que quizás ya podría estar cansado, agotado, ofuscado, la sorpresa es encontrarse con alguien predispuesto a tener una charla amena.
Por Cecilia Martí-TN