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Se robaron una caja fuerte con cinco millones de pesos de una distribuidora en Posadas

Delincuentes no identificados se alzaron anoche con la suma de cinco millones de pesos que estaban en una caja fuerte de una distribuidora en la localidad de Posadas.

El o los ladrones se llevaron consigo los registros de las cámaras de seguridad e incluso para asegurar el golpe guardaron al perro de la empresa en un quincho del lugar.

Todo esto indica que hubo un análisis de los movimientos del lugar debido a que además en ese momento no estaba el sereno en la empresa. Por esta razón los investigadores no descartan una participación interna.

Los hechos ocurrieron sobre la avenida 131, donde funciona una distribuidora de congelados de la que es dueño Cristian (38). La denuncia fue realizada ante los efectivos de la Comisaría Decimoctava de la capital provincial.

El empresario expresó que salió del complejo cerca de las 22 del jueves y regresó poco antes de las 8 de la mañana de la víspera. En esa instancia notó que habían forzado la puerta trasera del galpón.

Según lo reconstruido, desde allí se fueron a la oficina, donde también forzaron la puerta para hacerse de una caja fuerte color negro marca bonus. La misma contenía cinco millones de pesos discriminados en billetes de mil.

El hombre manifestó que contaba con un circuito cerrado pero que los delincuentes se llevaron los DVD. Además que había encontrado a su perro rottweiler en el quincho del sitio.

Todo indica que los delincuentes ingresaron por el fondo del terreno, donde hay un baldío por el que cruza un arroyo. Esto debido a que los tejidos del lugar estaban bajos, por lo que se presume que fueron pisados.

Consultado por el sereno del sitio por parte de los efectivos, Cristian expresó que hay un hombre de 60 años que cuida el lugar e incluso vive allí. Sin embargo, el hombre está internado en el Hospital Madariaga desde el miércoles.

Según se pudo saber, el dinero estaba destinado al pago de uno de los proveedores, transacción que se iba a hacer en la víspera.

El denunciante expresó que no sospecha de sus empleados, aunque desde la fuerza se manifestó que se están haciendo las averiguaciones de rigor respecto al personal. Por ellos se solicitó la colaboración de Cibercrimen.

Además se hicieron las pericias de rigor en el sitio y se recorrió la zona en busca de testimonios o cámaras de seguridad que podrían haber captado a los malvivientes. Sin embargo, hasta el cierre de esta edición no había novedades de peso.