El exasesor ultraconservador de Donald Trump considera que la continuación del legado de Francisco podría producir una crisis en la Iglesia Católica en la próxima década.
La elección de Robert Francis Prevost para suceder al Papa Francisco fue festejada por el presidente estadounidense Donald Trump. A pesar de que León XIV es el primer máximo pontífice norteamericano, el exasesor del republicano, Steve Bannon, lo considera como la peor decisión por su ideología “progresista”.
En una entrevista con el periodista inglés Piers Morgan, el exasesor de ultraderecha de Trump había anticipado que a los sectores ortodoxos los hubiera beneficiado la elección de Robert Sarah como nuevo pontífice de la Iglesia Católica. Sarah es el cardenal negro y conservador de Guinea. Al mismo tiempo, Bannon había advertido que el nombramiento de Prevost, como finalmente sucedió, era lo menos favorable para los planes de la derecha.
“Creo que uno de los candidatos sorpresas ('dark horses') es el cardenal Prevost, que es uno de los más progresistas”, había dicho Bannon días antes de la fumata blanca. Para el exasesor de Trump, el cardenal nortemericano era indeseable desde la perspectiva conservadora por su vínculo con Francisco, y advirtió que si continúa su legado podría haber una división en la Iglesia en los próximos diez años.
“Si hay otro Papa progresista como Francisco, habrá un cisma, y yo no uso esa palabra a la ligera. Pero creo que, después de haber estado involucrado en esto durante diez años, puedo verlo venir”, señaló Bannon y remarcó: “Si tenemos a otro como Francisco creo que es inevitable que en menos de una década tengamos un cisma importante en la Iglesia”.
A continuación, Bannon afirmó: “Prevost es uno de los más cercanos ideológicamente a Francisco. Él también ha tenido una larga experiencia en Latinoamérica”. El nuevo Papa misionó en el continente, pero además tuvo un fuerte anclaje en Perú, de donde tiene segunda nacionalidad por elección propia. Tal es así que en su primer saludo desde el balcón de la Basílica de San Pedro dio parte de su mensaje en castellano y recordó su trayectoria.
El exsocio de Trump finalmente dio su opinión sobre quién le convenía a sus aliados. “Soy un gran creyente de que el cardenal Sarah de África sería una elección perfecta para este momento en la Iglesia”, sostuvo.
De forma acertada, Bannon además consideró que la elección del nuevo pontífice podía suceder en vísperas al aniversario del Día de la Victoria, cuando se conmemora la derrota del nazismo por parte de la Unión Soviética en 9 de mayo de 1945, y lo interpretó como una señal. “Creo que en este momento la elección es tan importante. Es interesante, pero irónico, la elección sucederá en el día o el día anterior al 80º aniversario de la victoria en Europa”, dijo.
A pesar de la mirada de Bannon, Trump se mostró exultante en redes y expresó: “¡Felicitaciones al cardenal Robert Francis Prevost, quien acaba de ser nombrado papa! Es un gran honor darnos cuenta de que es el primer papa estadounidense. Qué emoción, y qué gran honor para nuestro país. Espero con ansias conocer al papa León XIV. ¡Será un momento muy significativo!”.
Estados Unidos tiene un 20% de la población católica. Otro dato a tener en cuenta es que el vicepresidente, JD Vance, quien fue el último político en entrevistarse con Bergoglio antes de su deceso, recientemente se convirtió al catolicismo y había sido criticado por Prevost en su cuenta de X. Además, los últimos presidentes católicos fueron demócratas: Joe Biden y John F. Kennedy.
Fuente: Perfil