A 10 mil metros de altura notaron que algo andaba muy mal.
Una pareja inglesa que vive en Fulham había planeado ir a Marsella, Francia, a ver un partido de fútbol. El regreso, naturalmente, era a su ciudad en el Reino Unido. Pero algo salió mal para Elise Mallia, de 33 años, y Jessy Jezequel, de 41. El avión de Ryanair que los tenía que llevar a casa aterrizó a 1.300 kilómetros y en otro país: España.
La pareja había aprovechado el tour para hacer un pequeño recorrido por la ciudad portuaria antes de ir al aeropuerto: su ticket de embarque pasó por tres controles antes de ingresar a la puerta de embarque, pero igual terminaron inesperadamente extendiendo su viaje con un viaje a la capital española, según cuenta Mirror.
No fue hasta que la pareja descendió a Madrid que se ambos dieron cuenta de la confusión. Elise, que trabaja como agente inmobiliaria de Fulham, dijo: “Una hora después de nuestro vuelo, Jesse dijo que pensó que escuchó a una azafata decir Madrid, pero pensamos que lo había soñado”.
Y continuó con su relato: “Pero después de eso empezamos a darnos cuenta de que todos los auxiliares de vuelo hablaban español. Cuando preguntamos, nos dijeron que íbamos a Madrid, y no teníamos idea de cómo era posible estar en ese vuelo y no el del que nos llevaba a casa”.
La mujer contó además que habían escaneado sus tarjetas de embarque tres veces antes de abordar el vuelo y asumió que debían estar equivocados, pero cuando lo verificaron, no lo estaban. Se acercaban a Madrid. “Estábamos desconcertados y también los asistentes de vuelo”, dijo.
“Entramos en pánico”
“Llegamos a casa al final, pero todavía no tenemos idea de cómo sucedió. No es como tomar el autobús equivocado, ¡literalmente terminamos en un país diferente!”, exclamó.
La historia se hizo viral en abril, cuando la pareja había reservado un vuelo de Marsella a al aeropuerto de Stansted y se dirigía hacia lo que creían que era la puerta de embarque correcta. Elise dijo que juró que vio ‘Madrid‘ en la puerta vecina a la de ellos.
Recordó que incluso le hizo una broma a Jesse de que deberían continuar con sus vacaciones e ir a España en lugar de regresar a Londres, sin darse cuenta de que estarían cumpliendo esa idea, pero no en el momento adecuado.
Elise dijo: “¡Seguramente debe ser bastante difícil subirse al avión equivocado debido a la seguridad! La pareja finalmente regresó a Fulham, pero cinco horas más tarde de lo planeado. “Estábamos en pánico y tratamos de explicarle al personal que se suponía que no debíamos estar en España”.
La pareja no deja de sorprenderse por las fallas en los controles_ “Todos pensaron que estábamos locos al principio, hasta que les mostramos nuestras tarjetas de embarque. ¿Cómo nadie notó nuestras tarjetas de embarque o que había dos pasajeros más en el vuelo?
“¡Seguramente no deberías poder subirte al avión equivocado sin que nadie se dé cuenta!”.
Un portavoz de Ryanair dio detalles de lo que la empresa cree que sucedió: “El Sr. Jezequel y la Sra. Mallia abordaron su vuelo de Marsella a Londres Stansted a través de la puerta correcta. Sin embargo, estos pasajeros no siguieron la ruta asignada al avión que partía hacia Londres Stansted, cruzaron un área no autorizada y abordaron por error un vuelo con destino a Madrid“.
Y detalló: “En cuanto a que la pareja ocupó los mismos asientos asignados en su vuelo original, explicaron: “Ambos pasajeros pudieron ocupar los mismos asientos que habían reservado para su vuelo original, ya que este vuelo no estaba completamente reservado, por lo que no se les alertó de su error en este momento”.
“Antes de la salida de cada vuelo, se hace un anuncio que informa a los pasajeros sobre su destino final y la hora estimada de llegada, lo que debería haber alertado al Sr. Jezequel y a la Sra. Mallia de que estaban en el avión equivocado”, explicaron.
“Al llegar al aeropuerto de Madrid, estos pasajeros se dieron cuenta de su error y el personal de Ryanair fue notificado de estos pasajeros desviados. El Sr. Jezequel y la Sra. Mallia fueron acomodados en un vuelo de Madrid a Londres Stansted ese mismo día.
La empresa les adjudicó la responsabilidad para abordar el vuelo que corresponde: “Es responsabilidad de cada pasajero asegurarse de abordar el avión correcto“.
Fuente: Clarin