En dos intervenciones realizadas entre ayer y hoy en Santo Pipó y en Oberá, efectivos policiales aseguraron tres ejemplares de aves silvestres, una lechuza madriguera, un loro y un búho, que se encontraban en situación de riesgo. Los animales quedaron bajo resguardo especializado para su atención veterinaria y posterior rehabilitación.
El primer procedimiento tuvo lugar ayer en Santo Pipó, cuando cerca de las 17:30 horas un vecino de 44 años alertó a los efectivos tras observar en los estados de WhatsApp de una mujer del barrio Apepu la presencia de dos aves en cautiverio. Ante ello, agentes de la Comisaría local se dirigieron al domicilio señalado, donde la joven de 23 años entregó voluntariamente una lechuza madriguera y un loro que mantenía en su vivienda.
Tras constatar el estado de los ejemplares, fueron asegurados y trasladados a un centro especializado, donde recibirán evaluación veterinaria y tratamiento. Por disposición del Juzgado de Instrucción Nº 2 de Jardín América, se tomó declaración a la involucrada bajo el artículo 250 del Código Procesal Penal y se iniciaron las actuaciones correspondientes por presunta infracción a la normativa de protección de fauna silvestre.
Por otra parte, esta mañana en Oberá, personal de la Unidad Regional II intervino tras ser alertado sobre un ave herida en la vía pública. En el lugar constataron que se trataba de un búho Auluculus con lesiones que le impedían desplazarse, motivo por el cual se activó el protocolo de resguardo de fauna silvestre.
De manera inmediata se dio aviso al Centro de Rescate y Rehabilitación Ohana, cuyo equipo especializado arribó al sitio y trasladó al ejemplar para su atención veterinaria. Una vez completada su recuperación, los animales serán reinsertados en su hábitat natural.





