El próximo arribo del portaaviones nuclear estadounidense USS George Washington a aguas argentinas despierta polémica y cuestionamientos sobre la soberanía del país. La llegada del USS George Washington ¿es una alianza o una subordinación del gobierno de Javier Milei ante la potencia norteamericana?
El anuncio del próximo arribo del portaaviones nuclear USS George Washington a aguas argentinas para realizar ejercicios militares con la Armada Argentina entre el 29 y el 30 de mayo esta generando fuertes dudas en propios y extraños sobre la independencia y soberanía del país.
Sin lugar a dudas, será un hecho histórico que marcará un triste giro diplomático del Gobierno de La Libertad Avanza, buscando imitar las “relaciones carnales” de los 90, al estrechar lazos con Estados Unidos en detrimento de relaciones históricas con otros países.
Será el portaviones USS George Washington, considerado uno de los buques de guerra más imponentes del mundo, quien será recibido con honores por el Ministro de Defensa, Luis Petri, y se espera la presencia del Presidente Javier Milei, quien incluso según Infobae, podría subir a bordo para una foto protocolar.
Sin embargo, esta visita no está exenta de críticas y cuestionamientos sobre la verdadera agenda detrás de este acercamiento militar.
La última vez que un portaaviones estadounidense visitó Argentina fue hace 14 años, durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner. Obviamente que el contexto de las relaciones políticas era otro y no es necesario hacer un análisis de las diferencia.
Esta reaparición del USS George Washington en aguas argentinas es el reflejo del cambio de postura del Gobierno actual, que busca alinearse, a cambio de nada, con los intereses estadounidenses en la región.
Recordemos que el hecho de autorizar la entrada de tropas extranjeras al territorio nacional para participar en estos ejercicios militares ha levantado sospechas y cuestionamientos sobre la soberanía y autonomía de Argentina. Y la pregunta que todos debemos hacernos, ¿se trata de una cooperación estratégica o de una subordinación a los intereses estadounidenses?
Debemos estar atentos a todos los sucesos que vienen antecediendo en materia de soberanía. No es casual el arribo de buques de guerra franceses a Tierra del Fuego sin la autorización del Congreso ha generado diversas reacciones, desde la admiración hasta la preocupación por posibles movimientos geopolíticos de la OTAN en la región.
Aunque la Marina Nacional de Francia afirma que la visita, en este caso, tiene como objetivo mejorar la interoperabilidad entre fuerzas armadas, algunos expresan inquietud sobre la verdadera naturaleza de la operación. La presencia de tropas extranjeras en un territorio estratégico y disputado como Tierra del Fuego sin el aval del Congreso ha levantado sospechas sobre una posible amenaza a la soberanía nacional.
Ahora, las maniobras militares entre el USS George Washington y la Armada Argentina plantean interrogantes sobre la verdadera agenda del Gobierno y sus consecuencias para la política exterior y la seguridad nacional.
Por Walter Onorato-EO