El gobierno proyecta erogaciones para el 2025 sin tener en cuenta los aportes de la Nación.
Como ya es una marca de la Renovación, el cálculo incluye casi un 70% en inversión social con Educación y Salud como las áreas que más fondos recibirán.
El gobernador Hugo Passalacqua, envió a la Cámara de Representantes de la provincia el Proyecto de Ley de Presupuesto General para la Administración Pública Provincial correspondiente al año 2025, como marca la ley, antes del inicio del mes de agosto. Más allá de los números que los legisladores deberán analizar, se trata de una iniciativa que viene a marcar la cancha, en términos políticos y a poner en evidencia que más allá de las negociaciones con el gobierno nacional por los votos en el Congreso, es el Estado provincial quien se auto financia gracias a una administración austera de los recursos, que le permite avanzar en obras, proyecciones y sobre todo política social. Este presupuesto, que asciende a $3.107.874.111.000, es una declaración de prioridades y valores que define el rumbo de la gestión pública para el próximo año.
La clara prioridad otorgada a las áreas de Salud (23%), Bienestar Social (21,1%) y Cultura y Educación (25,3%), que en conjunto suman un 69% del total del presupuesto, es un testimonio de la continuidad de las políticas de inclusión social de la Renovación bajo la conducción del ingeniero Carlos Rovira. Esta distribución de recursos refleja un compromiso firme con la igualdad de oportunidades y la promoción del bienestar de todos los misioneros,
especialmente en un contexto nacional marcado por la reducción de fondos destinados a programas educativos, de salud y de infraestructura, por parte del gobierno nacional.
Es por ello que la decisión del gobierno misionero, de asignar recursos propios para complementar estas áreas, es una muestra de responsabilidad y previsión. El ministro de Hacienda, Adolfo Safrán, subrayó la importancia de mantener una administración ordenada y sin déficit fiscal, muletilla tan utilizada desde el 10 de diciembre por el presidente, Javier Milei y su equipo económico. Estas herramientas le permiten a Misiones afrontar estos desafíos sinrecurrir a políticas de ajuste que podrían afectar negativamente a los sectores más vulnerables de la sociedad.
La inversión social es una estrategia fundamental para garantizar un desarrollo equitativo y sostenible. La educación, en particular, se destaca como la herramienta más poderosa para lograr la verdadera inclusión y la igualdad de oportunidades. Apostar decididamente a la educación no solo beneficia a los individuos, sino que también fortalece el tejido social y promueve un futuro más próspero para la provincia.
Asimismo, la asignación del 8,5% del presupuesto a áreas relacionadas con el Desarrollo de la Economía es crucial para impulsar el crecimiento económico. Fortalecer los programas productivos, apoyar a los emprendedores y promover el desarrollo industrial son acciones que no solo generan empleo, sino que también dinamizan la economía local. La infraestructura, incluyendo obras de transporte y distribución de energía eléctrica, es fundamental para mejorar la competitividad y atraer inversiones.
El desafío de gestionar los recursos públicos en un entorno de recortes nacionales y crisis económicas no es menor. Sin embargo, la fortaleza de una administración ordenada y la baja deuda pública de Misiones son ventajas significativas que permiten a la provincia avanzar con confianza y determinación.
El Presupuesto 2025 de Misiones es una manifestación concreta de un proyecto político comprometido con la inclusión social y el desarrollo económico. La priorización de la educación, la salud y el bienestar social, junto con una gestión financiera prudente y estratégica, son elementos clave que reflejan una visión de futuro donde todos los misioneros tengan la oportunidad de prosperar. Es fundamental que esta visión sea apoyada y promovida
para asegurar un desarrollo equitativo y sostenible en la provincia.
Por Sergio Fernández