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Verna vuelve y el peronismo de La Pampa acomoda sus melones

El exgobernador repareció con una foto y apacigua el conflicto con Ziliotto, pero también reafirma tensiones. Relatos del “fuego amigo” y autoestima oficialista reforzada.

El peronismo pampeano empezó a acomodar sus melones en el viaje hacia las elecciones del 14 de mayo y el siempre potente “retorno” del exgobernador Carlos Verna fue un empujón favorable para la autoestima oficialista, que busca mantener su invicto en elecciones ejecutivas desde la recuperación de la democracia.

La reaparición en acción del exsenador que lidera la línea Plural es todo un mensaje al interior del movimiento y la confirmación de dos cuestiones fundamentales: por un lado, que banca sin dudas la lista de unidad que propicia la reelección del gobernador Sergio Ziliotto; por otro, que incidió de modo notable en la conformación de esa boleta del Frente Justicialista Pampeano (FreJuPa).

El frente filoperonista conoció el 12 de febrero, con satisfacción y tras una elección deshilachada, que su rival será el radical Martín Berhongaray y no el candidato del PRO. Al margen de lógicas tensiones y condimentos locales, la forzada unidad contempla participación de todos los sectores internos.

El Grupo de los 8

Verna, siempre enigmático, estaba borrado de la escena desde mayo del año pasado, cuando hizo su última intervención en una red social para lamentar el fallecimiento de Oscar “Cabocha” Zanoli, uno de sus delfines preferidos, quien ocupaba una banca legislativa.

En TwitterFacebook Instagram Verna divulgó el último jueves a la tarde su encuentro con “amigos” a los que invitó a “tomar mates”. Es un Grupo de los 8 en el que sentó a quienes coló en la boleta legislativa provincial: la candidata a vicegobernadora Alicia Mayoral, el diputado provincial Hernán Pérez Araujo y su par Silvia Larreta, el exsenador Daniel Lovera, el intendente de La Adela Juan Barrionuevo y las dos caras más nuevas, Noelia Sosa y Caro Giussi.

La foto del “regreso” tiene enorme peso simbólico a partir de que ese tipo de comportamientos políticos de Verna ya son leyenda respecto de su incidencia. Mientras el peronismo espera la tranquilizadora selfie de Verna con Ziliotto, este retrato es una primera demostración de que algunos ruidos entre ellos se aplacaron, las grietas se van cerrando y están en la misma vereda.

Memorias del fuego amigo

No pareció ser tan así en las legislativas de 2021, cuando el peronismo sufrió una derrota histórica contra Juntos por el Cambio (JxC). Esa vez, Verna bajó su propia candidatura y además dijo que no apadrinaba a ningún postulante. Ziliotto tomó la responsabilidad absoluta del armado de la lista, que fue una alianza entre la mayoritaria línea Plural, Convergencia y el kirchnerismo.

Verna no intervino, se ausentó de la campaña y fue notable que la derrota del peronismo se afianzó en los territorios que son su bastión político, fundamentalmente el norte provincial, con el mejor ejemplo en General Pico, segunda ciudad de la provincia.

Aunque las sospechas recayeron sobre el propio Verna, porque hasta la intendenta de su confianza, Fernanda Alonso, pidió licencia en las semanas previas a la votación, en las últimas horas Alicia Mayoral reveló la existencia del “fuego amigo” en la etapa proselitista.

Mayoral es una dirigente de bajo perfil y de escasas apariciones mediáticas, pero casualmente el día previo a la foto con Verna hizo declaraciones altisonantes, en las que deslizó críticas al vicegobernador, el marinista Mariano Fernández, prometió ella misma ser una vice “de puertas más abiertas” y advirtió: “Está muy lejos el momento de que el poder no pase por los líderes del peronismo (Verna y el también exgobernador Rubén Marín). Aunque no estén en los lugares activos, creo que con el paso del tiempo están más sabios…”

Conducción y escenario nacional

Mayoral es tan ultravernista que, como ella misma contó ahora, quien le anunció que sería la candidata a vice no fue Ziliotto, sino el propio Verna. Los cimientos de la Plural se movieron en los últimos años a partir de que Ziliotto, gobernador apadrinado por Verna y luego designado presidente del partido, hizo algún intento de erigirse también en conductor.

Verna había salido de los lugares institucionales cuando terminó su gestión en 2019 y evitó buscar la reelección para enfrentar un tratamiento contra el cáncer. Sus escasas apariciones públicas, desde entonces, dejaron adivinar algunas disidencias con el gobierno y sus soldados más cercanos lo pusieron en evidencia. Los últimos movimientos evidencian acercamientos entre ambos popes.

Tras la reaparición de Verna, el gobernador hizo silencio, pero un dirigente de su confianza, el senador Daniel Bensusán, dijo muy claramente que “es importante para el peronismo que Verna participe”. Ziliotto insiste en hacer campaña desde la “gestión”, que ha sido su caballito de batalla.

En ese contexto, el peronismo pampeano intenta, como a lo largo de su historia, mantenerse al margen de los vaivenes de la realidad nacional, que de todos modos inciden cotidianamente con sus movimientos sísmicos. No está muy claro cuál sería hoy el alineamiento de los líderes del peronismo vernáculo, que aunque hizo todo por despegarse del gobierno de Alberto Fernández, reconoce que en asuntos concretos y en distribución de recursos ha sido una gestión muy favorable para la provincia.

Ziliotto tejió relaciones políticas de cercanía con el ministro del Interior, Eduardo de Pedro, que incidió por ejemplo para que se resolviera en favor de La Pampa el conflicto con Mendoza por la paralizada obra de Portezuelo del Viento que afectaba el río Colorado.

En 2019, Verna pactó con Cristina Fernández de Kirchner el armado del Frente de Todos, con aquel acto del 17 de octubre en Santa Rosa, la capital pampeana. Desde entonces, se fueron generando alejamientos. La foto con “sus” legisladores es también una forma de marcar la cancha con vistas al armado de las listas nacionales y con la ocupación de espacios en la Legislatura local, donde ya hay una experiencia conflictiva del peronismo: en 2011-2015 el gobernador Oscar Mario Jorge sufrió un bloque oficialista del vernismo haciéndole oposición.

Por Juan Pablo Gavazza – Letra P