Tras la digitalización de los archivos desclasificados sobre jerarcas nazis en el país, se conocieron documentos sobre el excomisario que vivió en Vicente López, Miramar y Belgrano bajo la identidad falsa de Pedro Olmos.
El Archivo General de la Nación (AGN) publicó en su página web archivos sobre la actividad de exjerarcas nazis que se refugiaron en Argentina tras la caída del régimen del Tercer Reich, la información anteriormente estaba disponible en una sala del organismo. Entre los documentos que se digitalizaron este jueves figura el expediente de Walter Kutschmann, un excomisario de la Gestapo que llegó al país bajo la identidad falsa de Pedro Ricardo Olmos.
Kutschmann llegó a la Argentina en 1948 luego de haber conseguido, en la España gobernada por el dictador Francisco Franco, una partida de nacimiento adulterada con la nueva identidad que usaría durante casi 40 años hasta ser descubierto. Está acusado de haber ordenado dos fusilamientos masivos de judíos, uno en el que fallecieron 65 de ellos, en Drohobycz, y otro en el que asesinaron a 500 en Tarnopol en 1942. Si bien fue detenido en 1985, falleció en 1986 antes de ser extraditado. Vivió en Ciudad de Buenos Aires, Florida (Vicente López) y Miramar.
De acuerdo a los archivos digitalizados, en julio de 1975 la Asociación Israelita de Sobrevivientes de la Persecución Nazi informó a el gobierno de Isabel Martínez de Perón que Kutschmann se encontraba en el país bajo la identidad ficticia. Meses después, un periodista de la revista Gente logró identificarlo en su departamento en Miramar. Los documentos desclasificados no dan cuenta de lo sucedido con su búsqueda durante la dictadura de 1976. Recién en 1983 vuelve a darse con su rastro y en 1985 la Interpol lo detiene en Florida.

Durante todo ese tiempo, Kutschmann hizo una vida relativamente normal en el país. Trabajó primero en una ferretería alemana; entre 1952 y 1958, como taxista independiente y, desde 1958, como director de compras de la sucursal argentina de la empresa Osram, hasta que fue despedido en 1975 a raíz de las publicaciones periodísticas que lo identificaban como quien verdaderamente era.
Walter Kutschmann había nacido en Dresden el 24 de mayo de 1914. Su padre, un dentista, había fallecido en 1928 y su madre Johanna Hoffman en 1941. Tuvo dos hermanos, Klaus, quien había muerto en la guerra en 1941, y Hanna Christine Hoffman, que también vivió en la Argentina. Años después de su llegada al país a se casó con otra alemana, Geralda Baeumler, con quien vivió hasta sus últimos días.
Si bien había sido identificado en 1975 en Miramar en su domicilio en la calle 29 número 599, fue detenido con la vuelta a la democracia en 1985 en Florida. Un año más tarde, mientras la Justicia tramitaba su extradición, falleció en el Hospital Fernández y fue sepultado en Los Polvorines, Malvinas Argentinas.

La carrera nazi de Walter Kutschmann
Antes de ser comisario de la Gestapo, Kutschmann integró las Juventudes Hitlerianas y en 1936 egresó de la Fuerza Aérea con el grado de sargento. A pesar de ser alemán, entre 1937 y 1939 participó en la guerra civil española enrolado en la Legión Marroquí de Franco. De vuelta en sus tierras, en 1939, ingresó a la Gestapo.
En la investigación realizada por el juez alemán Peter Wummel, de acuerdo al diario La Nación de marzo de 1986, Kutschmann protagonizó los fusilamientos en 1941 y 1942, más arriba mencionados. “Las víctimas debían cavar una fosa у соlocarse sobre el borde, rodeándola. Luego y desde atrás, se les disparaba a la cabeza con armas de puño. En oportunidades se usaron armas largas de repetición”, describió La Nación.
Además de esos crímenes, el genocida cometió delitos sexuales y un femicidio. Uno de ellos fue contra una “amante forzada”, una adolescente de entre 15 y 17 años de apellido Feld, que estaba obligada a realizar tareas domésticas en un campo de concentración. "Había una chica judía —dijo el testigo Marian Nadel— que se llamaba Feld, y Kutschmann, que tenía muy buen aspecto físico, la tomó como su amante. Un día nos enteramos que la introdujo en un sótano de la Gestapo y la mató de un tiro. Dijeron que era porque le había contagiado una enfermedad venérea”, detalla el mismo medio.
Fuente: Perfil