“Usted juró ante el tribunal que iba a decir la verdad, pero está mintiendo descaradamente”, sentenció Sandro Abraldes. El juez Ramos Padilla decidió esperar al final del debate para resolver.
En la jornada de este jueves, el fiscal del juicio contra José Alperovich, acusado por abuso sexual, pidió la inmediata detención de Víctor Hugo Decataldo por falso testimonio. El testigo trabajó con el exsenador durante la campaña a gobernador de 2019 y, para Sandro Abraldes, mintió en su declaración.
Decataldo es un empresario tucumano que en 2018 comenzó su relación política con Alperovich, cuando se incorporó al equipo de campaña para gobernador. Su participación consistía en ayudar en proyectos, y de esa manera comenzó a militar con el exsenador.
Tiempo después, comenzó una relación amorosa con Sara, la hija de Alperovich. De esa manera se convirtió en una persona muy cercana al senador. Para el fiscal, el hombre mintió en su testimonio y esto se descubrió a partir de los chats que fueron incorporados al expediente.
El joven declaró en el juicio que en 2019 “armó una estrategia” para sacarle información a la denunciante. “Yo quería saber qué había pasado en relación a esa denuncia. No tenía mucha relación con ella, mi relación era más con Sarita, la hija de Alperovich. Yo la veía mal porque se rumoreaba que esta chica iba a hacer una denuncia contra su padre. Entonces armé una estrategia para que ella hablara, para sacarle mentira / verdad”, reveló.
“Ella me contó que estaba sufriendo una situación difícil y le contesté: ‘José es un animal, parece un alzado’. Intenté tener empatía con ella, decirle que sí a todo e inventé cosas. Fue una mala idea que se me ocurrió, pido disculpas”, expresó el testigo ante el juez Ramos Padilla.
En los chats, la denunciante le reconoció al testigo que estaba siendo abusada por Alperovich, a lo que él le respondió: “Yo te creo, también fui violado”. Pero durante el debate, el hombre aseguró que ella “jamás le había dicho nada” sobre un supuesto ataque sexual.
Además, en los mensajes también le manifestó la posibilidad de un “arreglo” económico entre las partes. “Podría haber plata de por medio, jaja”, le puso Decataldo a la denunciante en esa conversación por Instagram. “Fue una broma, no lo dije en serio”, retrucó el testigo en el debate.
El testigo también aseguró que todo se trató de una “operación política”, lo mismo que declaró Sara Alperovich cuando le tocó dar testimonio, y bancó al exlegislador. “Estoy seguro que esto es político”, sostuvo.
El pedido de la fiscalía: “Miente descaradamente”
“Usted juró ante el tribunal que iba a decir la verdad, pero está mintiendo descaradamente”, sentenció Abraldes, quien pidió la inmediata detención. La querella asintió al pedido, por lo que será considerado por el juez al final del testimonio.
Para fundamentar esta decisión, uno de los abogados de la querella pidió la lectura de la declaración completa que hizo Decataldo en el Tribunal de Tucumán, previo al juicio. “El testigo nunca dijo que esto se trataba de una estrategia para manipular a la denunciante. Recién lo trajo a colación en esta instancia. Mintió”, expresó.
“Víctor Decataldo contaba con información de afuera. Queda claro que calló deliberadamente en la primera declaración testimonial. Queda claro que lo único que hay genuino son esos chats. Lo que él sabe de este caso, está en ese chat, no lo que fue a exponer en Tucumán ni lo que vino a exponer acá”, insistió el fiscal.
“Estoy totalmente arrepentido de lo que dije e hice. Pido disculpas por toda esta situación, pero esta es mi verdad”, exclamó ante el juez, con los ojos llenos de lágrimas y con la voz entrecortada.
En tanto, la defensa reconoció que los chats y la estrategia son “repudiables”, pero aseguró que “no faltó a la verdad y que contó todo lo que pasó.
Ante esta situación, el juez Ramos Padilla decidió esperar al final del debate para resolver: “No veo la necesidad de pronunciarme ahora. Lo voy a hacer al final del juicio, es lo más prudente. Voy a escuchar a más testigos”.
Por Carolina Villalba-TN