El polémico sistema de descanso, que se estrenó en Tokio 2020, volverá a utilizarse para esta nueva edición. Los detalles.
Durante la jornada del lunes, arribaron a la Villa Olímpica las camas “anti-sexo”, para los Juegos Olímpicos de París 2024 que se disputarán desde el 26 de julio hasta el 11 de agosto.
El Comité Organizador instalará 16.000 camas con el objetivo de potenciar el descanso durante el certamen, a los más de 10.000 atletas que estarán distribuidos en 82 edificios y 7.200 habitaciones.
La estructura del lecho está fabricado en cartón para evitar “situaciones extradeportivas” y además, para su posterior reciclaje, una vez finalizado el certamen. También, cada uno de los competidores dispondrá de una app en la que, en base a su peso y su altura, podrá combinar perfectamente la dureza del colchón, conformado por tres piezas distintas.
Durante Tokio 2020, los atletas dudaron de que las camas “anti-sexo” hayan sido diseñadas para soportar una resistencia de 200 kg, aproximadamente, ante movimientos bruscos producidos, motivo por el cual se grabaron haciendo la prueba.
Por ejemplo, los jugadores argentinos de básquet Francisco Caffaro y Tayavek Gallizzi no sufrieron inconvenientes. Sin embargo, Diego Chiriff, entrenador del equipo de natación uruguayo, lo intentó, pero no corrió la misma suerte y la terminó quebrando.
Distribuirán 300.000 preservativos
Si bien las camas están hechas para evitar los movimientos bruscos que provocan las relaciones, los organizadores llevarán a cabo una política sanitaria responsable y pondrán 300.000 preservativos a disposición de los deportistas, acompañantes de delegación y entrenadores.
Dicha medida se lleva a cabo desde los Juegos Olímpicos de Seúl 1988 para la protección contra el virus del SIDA y para proteger la salud de las personas en general. Cabe destacar que en Tokio 2020 hubo restricciones de contacto social debido a la pandemia ocasionada por el COVID-19.