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El socialista Illa es investido presidente de Cataluña en una tensa sesión tras la aparición de Puigdemont

El socialista Salvador Illa fue investido presidente de Cataluña, en un día marcado por la fuga del independentista Carlos Puigdemont a su regreso a España. Puigdemont apareció en Barcelona este jueves 8 de agosto, en un acto organizado por sus seguidores, tras haber permanecido casi siete años fuera de España. De esta forma, retó a la Justicia frente a una orden de arresto que tiene pendiente en su contra. Luego de un poco más de tres horas de búsqueda, los Mossos d’Esquadra (Policía regional catalana) levantaron la Operación Jaula con la que pensaban localizarlo. La agencia EFE  informó que el secretario general del partido Junts, Jordi Turull, fue citado a declarar por su posible papel en la huida.

El socialista Salvador Illa fue investido este jueves 8 de agosto como presidente de la región española de Cataluña, en medio del desconcierto por el regreso a España del expresidente catalán Carles Puigdemont, tras siete años prófugo de la Justicia española y quien volvió a huir tras dar un mitin en Barcelona.

En una tensa sesión de investidura, que el partido de Puigdemont, Junts, pidió posponer por el operativo policial activado para detener al exdirigente, Illa logró los 68 votos necesarios para ser investido presidente regional, gracias al apoyo del partido independentista ERC y el partido de izquierda Comuns.

Al grito de “Independencia” y con banderas independentistas catalanas, los seguidores de Carles Puigdemont recibieron a líder separatista, que llegó acompañado por dirigentes de su partido independentista Junts per-Catalunya, para hablar desde un escenario instalado frente al conocido Arco del Triunfo de Barcelona.

Cinco minutos duró su discurso allí, donde dijo: “¡Vine a recordarles que todavía estamos aquí! Todavía estamos aquí porque no tenemos derecho a rendirnos”.

Luego, miles de personas lo acompañaron en su intento de llegar al parlamento regional, donde estaba prevista la sesión de investidura del socialista Salvador Illa como nuevo presidente autónomo de Cataluña. 

El líder separatista catalán Carles Puigdemont habla a su regreso a España tras siete años de exilio autoimpuesto, a pesar de una orden de arresto pendiente en su contra, durante un acto de bienvenida organizado por su partido, Junts per Catalunya, en el Arco del Triunfo de Barcelona, ​​España, el 8 de agosto de 2024.
El líder separatista catalán Carles Puigdemont habla a su regreso a España tras siete años de exilio autoimpuesto, a pesar de una orden de arresto pendiente en su contra, durante un acto de bienvenida organizado por su partido, Junts per Catalunya, en el Arco del Triunfo de Barcelona, ​​España, el 8 de agosto de 2024. © Lorena Sopena/ Reuters

Puigdemont habría afrontado su detención por un delito de malversación pendiente —que él niega— si hubiera intentado pasar el filtro de agentes de los Mossos d’Esquadra en la única entrada habilitada al Parlamento catalán, en el centro de Barcelona.

En ese caso, el pleno habría sido aplazado o suspendido, lo que habría retrasado la investidura de un gobierno socialista en Cataluña y habría puesto en peligro la frágil alianza del gobierno nacional con Junts, de la que depende para el apoyo legislativo.

El socialista Illa, investido presidente de Cataluña

Sin embargo, Carles Puigdemont nunca estuvo frente a la puerta, desapareció entre la multitud, y la votación para investir al socialista Salvador Illa, que contaba con el apoyo del partido separatista de izquierdas ERC (antiguos socios de Puigdemont), tras un acuerdo bilateral la semana pasada, comenzó a las 10 de la mañana (08.00 GMT).

En una larga y tensa sesión de investidura, que el partido de Puigdemont, Junts, pidió posponer por el operativo policial activado para detener al exdirigente, Illa logró los 68 votos necesarios para ser investido presidente regional, gracias al apoyo del partido independentista ERC y el partido de izquierda Comuns.

El resto de grupos en la cámara regional, los independentistas Junts (derecha), CUP (extrema izquierda) y Aliança Catalana (extrema derecha), así como el conservador Partido Popular, y el ultraderechista Vox, votaron en contra, en total 66.

El candidato del Partido Socialista de Cataluña (PSC), Salvador Illa, habla en el Parlamento regional de Cataluña el día del debate de investidura para elegir un nuevo líder, en Barcelona, ​​España, el 8 de agosto de 2024.
El candidato del Partido Socialista de Cataluña (PSC), Salvador Illa, habla en el Parlamento regional de Cataluña el día del debate de investidura para elegir un nuevo líder, en Barcelona, ​​España, el 8 de agosto de 2024. © Jon Nazca/ Reuters

En las elecciones del pasado 12 de mayo, el Partido Socialista de Cataluña logró una victoria histórica con 42 diputados, mientras que el independentismo perdió su tradicional mayoría a pesar del aumento de Junts, que pasó de 32 a 35, pero lastrados por la gran caída de ERC (gobernante hasta el momento) que perdió 13 escaños, al pasar de los 33 a los 20.

El partido Socialista regresa así al poder en la región tras 15 años de gobiernos independentistas.

La confusión por Puigdemont

El debate para jurar al socialista Salvador Illa como nuevo presidente de Cataluña comenzó en medio de confusión y especulaciones sobre el paradero de Puigdemont y cómo pudo haber desaparecido a plena vista.

“Teníamos que ver cómo el Estado permitió que este delincuente celebrara una manifestación”, dijo Ignacio Garriga, secretario general del partido de extrema derecha Vox, a los periodistas fuera del Parlamento catalán. “No entendemos por qué no ha sido detenido todavía”, agregó. 

Una portavoz del Ministerio del Interior catalán confirmó que Puigdemont había eludido su captura. “Puedo confirmar que Puigdemont no ha sido detenido todavía”, dijo. “Puedo confirmar que se han establecido controles de carretera para encontrarlo”.

Esto puesto que la Policía catalana, que sospecha de dos vehículos, lanzó la Operación Jaula para encontrar y detener al líder separatista tras su aparición en un mitin en el centro de Barcelona. Incluso, uno de sus agentes fue detenido tras haber sido acusado de ayudar a huir al expresidente catalán, pues era el titular del vehículo blanco que los investigadores creen que se usó para el escape. Sin embargo, al cabo de algo más de tres horas fue cancelado el dispositivo policial que involucró 300 agentes. 

La búsqueda del paradero de Carles Puigdemont creó caos de tráfico en Barcelona y cerca de la frontera con Francia por los controles de carreteras y registro de vehículos.

El político, de 61 años, que huyó a Bélgica hace siete años tras fracasar su intento de secesión y desde entonces vive exiliado, anunció el miércoles que había iniciado su “viaje de regreso”, detallando que seguía comprometido con asistir a la sesión del jueves del Parlamento regional, que tenía planeado reunirse para jurar al nuevo líder de la región tras las elecciones de mayo, en las que el partido Junts de Puigdemont quedó en segundo lugar.

“Que para hacerlo me arriesgue a una detención arbitraria e ilegal evidencia la anomalía democrática que tenemos el deber de denunciar y combatir”, dijo en un vídeo publicado en las redes sociales.

Ante el riesgo de que Puigdemont pueda ser encarcelado, uno de sus seguidores, Xavier Vizcaíno, de 63 años, envuelto en una bandera independentista, dijo que confiaba en que su regreso fuera un impulso hacia la independencia.

La ultraderechista Vox tenía previsto celebrar una contraprotesta a las puertas del Parlamento. Su secretario general, Ignacio Garriga, dijo en la X que “no toleraremos la humillación de ver entrar en el Parlamento a un delincuente y prófugo de la Justicia”.

En mayo de 2024, el Parlamento español aprobó una ley de amnistía para indultar a los implicados en el fallido intento de secesión de 2017. Sin embargo, el Tribunal Supremo mantuvo las órdenes de detención contra Puigdemont y otras dos personas, que fueron acusadas de malversación, por lo que esta ley no se aplica a ellos.

Puigdemont insiste en que el referendo no fue ilegal, por tanto, los cargos que se le imputan carecen de fundamento. 

Fuente France24