“Le recomiendo a Milei que vaya practicando el golf”, bromeó Richard Baldwin.
Richard Baldwin es catedrático de Economía Internacional en el Graduate Institute of International and Development Studies de Ginebra y Director del Centre for Economic Policy Research (CEPR) de Londres. Además fue asesor del expresidente de Estados Unidos George H. Bush.
La cuestión es que este especialista, reconocido por el sistema financiero internacional, puso en duda que el triunfo de Donald Trump en las elecciones de noviembre se traduzca en mejores condiciones para que Argentina consiga financiamiento externo.
“ElBanco Mundial y el FMI quieren asegurarse de que países como Argentina no se conviertan en estados fallidos. Con Trump, no se puede predecir (que hará con la Argentina), no es algo que el ex presidente norteamericano esté pensando”, dijo Baldwin y agregó “espero que su presidente sepa jugar golf“, recomendó el economista por ser una herramienta útil para agilizar negociaciones con el candidato republicano.
De hecho, así lo conoció Macri. Cuando su padre Franco lo mando a negociar con el magnate norteamericano por unas tierras que había comprado en Manhattan y finalmente se quedó Trump, las negociaciones fueron durante partidos de golf, deporte que ambos ex presdientes practican con asiduidad.
Sobre Milei, destacó que es “fascinante de ver desde afuera”aunque agregó que se presentaba con una motosierra “y el hombre resulta que es un político”. Agregó que “Parecía como que iba a entrar y destruir todo, pero nada de eso pasó”.
Con Trump, no se puede predecir (qué hará con la Argentina), no es algo que el ex presidente norteamericano esté pensando. Espero que Milei sepa jugar al golf.
Richard Baldwin estuvo en Argentina para participar de la presentación de un seminario de Techint dedicado a su principal obsesión: frenar la penetración de China en la región.
El Boletín Informativo Techint es uno de los formatos académicos que divulgan el ideario anti china de Paolo Rocca. En rigor, en esta edición se profundizó sobre la advertencia había hecho el titular del holding en un foro de la industria siderúrgica latinoamericana.
Rocca había afirmado ante el Congreso del Acero Brasil, en San Pablo, que competir con China se volvió “sustancialmente imposible” debido a la “absoluta asimetría” de las relaciones económicas y comerciales entre las economías de la región y el gigante asiático.
“Durante los últimos 30 años, el surgimiento de China como potencia industrial global dominante, con la ambición de ampliar su área de influencia comercial, política y militar, ha contribuido sustancialmente a la primarización de nuestras economías”, dijo el líder de Techint.
Un documento interno de Techint que circuló en aquel encuentro, tiene un título aún más explícito: “La amenaza china para la sustentabilidad del sector siderúrgico de América Latina”. El informe destaca que la capacidad de producción de acero de China aumentó 690% desde el año 2000; en tanto la producción siderúrgica latinoamericana aumentó 4% en el mismo período.
Como sea, Baldwin se refirió al rol del país en el comercio internacional: “Para que Argentina se inserte mas en las cadenas globales hay que moverla 2.000 kilómetros hacia arriba”, chicaneo Baldwin respecto a lo lejos que queda la Argentina como para beneficiarse del fenómeno del nearshoring.
En relación a la estructura productiva, este economista norteamericano fue determinante: “Países como Argentina, con gente con alto nivel educativo, pero bajos salarios, van a seguir modelos de desarrollo como el que tuvieron India, Filipinas o Costa Rica, en torno a grandes ciudades que exportan servicios, desde los más básicos a los más sofisticados”. El plazo para consolidar este esquema, según Baldwin, se desarrollará en próximos 20 o 30 años.
Por Luciana Glezer-LPO